Oh! Mi amor quiero recibir tu silencio en mi la ilusión que no tiene fin. Haceme bién tu árbol estival es de aquel lugar donde ayer comenzó el sol. Y en las manos, las selvas del aire. Dunas de un cuerpo guaraní. Creo que siempre hay una señal para amarte más en la luz, o en las sombras. Y en las manos, las selvas del aire, dunas de un cuerpo guaraní. Tengo que ver soldados ya perdidos, rosas muertas... ¡Oh!, mi amor quiero recibir tu jilguero en mí, la ilusión.