歌曲 | Que Son Esas Palabras |
歌手 | Juan Carlos Baglietto |
专辑 | Actuar Para Vivir |
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Veinte años vivieron el uno junto al otro, | |
veinte años de cardo de cereal y de trilla, | |
la rueda del molino, acompasaba las horas | |
y el invierno dormia en la hiedra amarilla. | |
El cuidaba de todo, con prudencia callada, | |
lo mismo los ganados, que la cosecha fina, | |
ella cruzaba el patio, como rueda de espuela, | |
entre el pozo de agua, la mesa de harina. | |
En inviernos atroces, en veranos soleados, | |
durante veinte años, se hicieron compañia, | |
nunca se preguntó, si la habia querido, | |
que son esas palabras, estaba y la tenia. | |
El no necesitaba noción mas detallada, | |
que conocer su nombre, y el nombre lo sabia, | |
él la llamaba Carmen en la sombra y la tarde, | |
cuando la luz es lámpara de mecha tardia. | |
Veinte años vivieron el uno junto al otro, | |
sin ver apenas médico, peón, colono, artista, | |
el tren pasaba lejos como un cuento de infancia, | |
y el no se preguntaba si en verdad la queria. | |
Ella murio lustrando la vajilla de plata, | |
en el ancho silencio de la tarde vacia, | |
el aprendio de golpe, como caen las heladas, | |
que el amor es amor, aunque no se lo diga. |
Veinte a os vivieron el uno junto al otro, | |
veinte a os de cardo de cereal y de trilla, | |
la rueda del molino, acompasaba las horas | |
y el invierno dormia en la hiedra amarilla. | |
El cuidaba de todo, con prudencia callada, | |
lo mismo los ganados, que la cosecha fina, | |
ella cruzaba el patio, como rueda de espuela, | |
entre el pozo de agua, la mesa de harina. | |
En inviernos atroces, en veranos soleados, | |
durante veinte a os, se hicieron compa ia, | |
nunca se pregunto, si la habia querido, | |
que son esas palabras, estaba y la tenia. | |
El no necesitaba nocio n mas detallada, | |
que conocer su nombre, y el nombre lo sabia, | |
e l la llamaba Carmen en la sombra y la tarde, | |
cuando la luz es la mpara de mecha tardia. | |
Veinte a os vivieron el uno junto al otro, | |
sin ver apenas me dico, peo n, colono, artista, | |
el tren pasaba lejos como un cuento de infancia, | |
y el no se preguntaba si en verdad la queria. | |
Ella murio lustrando la vajilla de plata, | |
en el ancho silencio de la tarde vacia, | |
el aprendio de golpe, como caen las heladas, | |
que el amor es amor, aunque no se lo diga. |
Veinte a os vivieron el uno junto al otro, | |
veinte a os de cardo de cereal y de trilla, | |
la rueda del molino, acompasaba las horas | |
y el invierno dormia en la hiedra amarilla. | |
El cuidaba de todo, con prudencia callada, | |
lo mismo los ganados, que la cosecha fina, | |
ella cruzaba el patio, como rueda de espuela, | |
entre el pozo de agua, la mesa de harina. | |
En inviernos atroces, en veranos soleados, | |
durante veinte a os, se hicieron compa ia, | |
nunca se preguntó, si la habia querido, | |
que son esas palabras, estaba y la tenia. | |
El no necesitaba noció n mas detallada, | |
que conocer su nombre, y el nombre lo sabia, | |
é l la llamaba Carmen en la sombra y la tarde, | |
cuando la luz es lá mpara de mecha tardia. | |
Veinte a os vivieron el uno junto al otro, | |
sin ver apenas mé dico, peó n, colono, artista, | |
el tren pasaba lejos como un cuento de infancia, | |
y el no se preguntaba si en verdad la queria. | |
Ella murio lustrando la vajilla de plata, | |
en el ancho silencio de la tarde vacia, | |
el aprendio de golpe, como caen las heladas, | |
que el amor es amor, aunque no se lo diga. |